En general, las personas e instituciones CONFIABLES se caracterizan por ser consistentes en sus actitudes y palabras. Pero también se da el caso, raro por cierto, de individuos tan inconsistentes, que solamente podemos confiar en que cambiarán de discurso antes de terminar el día.
Es el caso de este ejemplar de rebuznus lisboensis, de nombre vulgar MOU, que un día sí y otro también, nos sorprendían con cambios de discurso. Hablo en pasado porque a estas alturas ya sabemos que lo dicho ayer cambiará mañana.
La Liga de Fútbol Profesional lleva dos años viendo que sus rebuznos cambian 180 grados cuando le conviene. Veamos algunos casos:
1. Cuando aspiraba a entrenar al Barça, le escuchamos decir que las COPAS de CHAMPIOS ganadas por el Real Madrid estaban compradas. Dos años después de que el BARÇA lo rechazara, fichó para el Real Madrid, y entonces resultó que las COPAS despreciables eran las del Barça, mientras que las del Madrid adquirían brillo celestial.
2. Pocos minutos después de que el rebuznus lisboensis agrediera a Tito Vilanova ante las cámaras de TV y por la espalda (naturalemente) aseguró en rueda de prensa que no entendía a qué se referían los periodistas cuando le preguntaban sobre el dedo en el ojo, ni sabía quien era ese tal Vito o Pito.
3. Durante los meses finales del año 2011, el rebuznus lisboensis se encargó de ilusionar a los merengues y a su paisano con el BALON DE ORO, asegurando que se lo entregarían por sus goles, porque supuestamente valían más que los VOTOS de quienes son convocados para decidir el ganador del premio.
Como todos esperaban, el BALON DE ORO le fue otorgado a LIONEL MESSI, quien a pesar de haber metidos menos goles que el pupilo portugués, fue considerado el mejor jugador del año 2011.
Pero nuevamente y como era de esperar, el ejemplar lisboensis cambió de criterio y ahora grita a los cuatro vientos que este año los goles ya no cuentan, sino la calidad de juego. Todavía no ha hablado de los VOTOS, pero sabemos que pronto los despreciará para explicar que la opinión de los cientos de futbolistas del Mundo, Seleccionadores Nacionales y Capitanes de Selección, tampoco saben de fútbol y que han vuelto a ROBAR a su paisano.
Es tal la confiabilidad en sus cambios, que posiblemente en el curso de esta misma semana asegure que la selección de este premio no se hará de una manera ni de la otra sino todo lo contrario.
Por desgracia en los campos de la blanca amapola, rebuznus lisboensis tiene seguidores, porque hasta el capitán madrileño que tantas simpatías había cultivado, se ha transformado en un pericus vulgaris que copia los rebuznos del otro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario