PERDIMOS POR 2 -0 Y CON RESERVAS A LA VUELTA.

Vaya palo que nos han dado. El juego a la contra del MILAN y su "catenaccio italiano" dejó al BARÇA en la cancha con resultado de 2 a 0. Así pues a la vuelta hay que ganar con un 3 a 0, lo cual va a ser MUY DIFICIL porque los italianos jugarán de manera idéntica o peor. MILAN sabe hanar en Champions, como lo demuestran las 7 Copas que guarda en sus vitrinas.

El marcaje de los italianos fue duro, implacable, especialmente sobre MESSI e INIESTA. Ambos se veían constantemente rodeados de defensores y trabados de cualquier manera para impedir que avanzaran hacia el área milanista. Eso es absolutamente válido y si el árbitro permite el juego duro, también puede aprovecharse. En este aspecto tengo claro que los errores arbitrales trabajaron a favor de los locales, aunque no explicarían el resultado final.

El primer tiempo se cerró con tablas a "0". En el complementario se desarrolló el desastre, incluida otra herida en la frente de PUYOL, que jugó unos minutos con un emplaste sobre la frente y debió ser sustituido por MASCHERANO, vista la sangre que manaba de la herida. Diríamos que la cicatriz será algo así como otra raya para un tigre.

A pesar de lo dicho los dos goles encajados son válidos. Quizás no reflejan lo sucedido sobre el terreno de juego, porque BARÇA dominó el tiempo con un 70% a su favor, pero lo que cuentan son los goles y en el 2º tiempo los catalanes chutaron muy poco a la portería contraria. Los jugadores del MILAN no les dejaban espacios y eso es fútbol legal.

El primer gol fatídico, resultó por una mano de los atacantes que dejó el balón a los pies de BOATENG y éste colocó el disparo ajustado al palo largo. El 2º gol, acertadísimo chut de MONTARI, resultó tras un contragolpe, cuando el BARÇA trataba infructuosamente de empatar el partido.

¿Mala suerte del BARÇA? NO. Buen juego del MILAN, que supo ganar a pesar de estar diezmado en sus líneas. Planificaron este partido al detalle, igual que lo prepararán para el partido en el Camp Nou, pautado para el 12 de Marzo. Veremos ese día si el BARÇA hace valer su condición de local, con buen césped, mejor arbitraje y público a favor. No será fácil, pero en fútbol todo es posible.