He leído con frecuencia el término "CLOACA MEDIATICA" empleado por el colega David Gonzal para referirse a ciertos medios deportivos madrileños. Inicialmente pensé que el calificativo era duro, pero a estas alturas comprendo que la pestilencia que se respira en esos medios nacionales es de magnitud insoportable.
Con frecuencia rebaten la agresividad de los medios madridistas alegando que otros medios regionales siguen caminos similares. No es cierto. Podemos ver tendencias no disimuladas en favor de los equipos locales o regionales, pero no hemos notado la falta de extremos a los que está lleganso alguna prensa capitalina.
Comprendemos que defender los colores del Real Madrid sea la obligación de los medios de Madrid y entendemos que la propaganda pagada por ese Club y su Presidente sean determinantes en la orientación editorial de los medios clientelares. Podemos incluso admitir que habiendo sido ese Club el máximo exponente del deporte español, el Gobierno exija un trato preferencial hacia el Real Madrid, pero de ahí a difamar a otros clubes, mentir descaradamente y llegar a extremos tales como emplear el Photoshop para distorsionar la verdad o crear imágenes falsas...
Peor todavía es la falta de moral deportiva que con frecuencia rige las acciones de algunos medios deportivos madrileños, llegando al extremo de defender la violencia en los campos deportivos. Hemos visto en el S.Bernabeu pancartas promoviendo la violencia, entre otras la que ensalzaba la agresión de un entrenador que pretendió dañar el ojo de otro profesional, acto que podríamos acusar a la insensatez del mismo Club o de algún grupo violento, pero luego hemos visto la misma pancarta siendo expuesta cual un triunfo deportivo en un programa de TV, en medio de aplausos que ensalzaban el mensaje. Causa estupor leer artículos y escuchar programas de radio y TV alabando las amables personalidades de futbolistas agresivos que golpean a otros jugadores en el suelo o les pisan la mano canallescamente y a traición.
Ya en el colmo de la insensatez, se ha dado el caso del Director de un diario deportivo madrileño y madridista demandando en público que a un jugador del Barça había que "pararlo por lo civil o por lo criminal" y casualmente, en el partido del domingo siguiente ese futbolista fue sacado del campo en camilla.
Cuando la inmoralidad periodística llega a tales extremos, cuando se insiste en suplantar la verdad por mentiras descaradas, cuando se pierde el sentido del límite y pretendemos cambiar la deportividad por la violencia y sustituir el concepto de oponente por el de enemigo, es porque se ha perdido el Norte y los valores de la comunicación como profesión al servicio de la sociedad. En esas circunstancias los medios de comunicación se convierten en una CLOACA MEDIATICA.
1 comentario:
Duras pero reales palabras pero considero importante resaltar que en dicha "cloaca mediática" hay elementos y entidades dedicadas a crear discordia entre los ciudadanos ajenos a todo el follón futbolero. No es lo mismo los fans de un club que los habitantes de la ciudad, no es lo mismo los Cules que los Catalanes y no es lo mismo los Madridistas que los Madrileños.
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